jueves, 26 de agosto de 2010

un poema de isabel bono


y piensas,
hubo horas de silencio en una casa
cuando las tardes se vaciaban
de familia, de amigos
y el deseo de soledad
te tomaba para emprender
una búsqueda sin riesgos

ahora aquellas tardes no existen
porque no existe aquella casa
ni aquella luz

y piensas,
la luz nunca vuelve

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Isabel,

Extraordinario poema...latente, vivo.

isabel bono dijo...

gracias,
es un placer tener lectores como tú

Loli Pérez dijo...

Cuántos recuerdos despertó este poema en mí...
Aquella casa tampoco existe ya..

Besos